El país esta sufriendo las consecuencias de decisiones mal tomadas por aquellas personas que han llegado al poder. En este cuatrenio, han querido "resolver" la situación afirmando que no hay otras opciones. Sin embargo, los medios utilizados han empeorado la misma. La falta de organización, de sensibilidad, de profesionalismo, entre otros, ha levantado en muchos puertorriqueños un sentido de apoderamiento que hace años no se veía. Apoderamiento de su pueblo, de su cultura, de sus familias, de su naturaleza y de todo lo bello que nos hace puertorriqueños, incluyendo a los compatriotas adoptados que dijeron presente para demostrar la desilución e indignación.
El momento histórico nos invita a que dejemos la indiferencia y el miedo para defender bajo una sola bandera lo que es nuestro. Por que antes de ser doctores, maestros, profesionales, o pertenecientes a un partido, somos hijos de una misma patria.
Si amamos nuestra Patria, nuestro Hogar, entonces podremos apreciar realmente otras culturas.
Este momento histórico no sólo se ha quedado en Puerto Rico. Ha roto barreras de distancia. Teniendo el apoyo en otros lugares del mundo. Yo decidí ser protagonista en nuestra historia por que no nos podemos conformar con la injusticia (Betances).
Hoy, por esa injusticia se afectan no sólo las personas desempleadas si no también aquellas personas que reciben los servicios. Nadie ha dicho que los servicios del gobierno no se deben reestructurar. La forma en que lo han hecho es lo que no podemos permitir. Hoy son ellos. Mañana podemos ser nosotros. Se tu tambien protagonista de la historia. Sí, debemos orar, pero como dice el dicho A Dios orando y con el maso dando.
Puertorriqueños en Nueva York
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